...Una sesión de fotos...
Después de haber tomado la decisión de hacerte una sesión de fotos comienzas a entender en realidad de que se trata dedicar algunas horas del día a ti misma. Hacerse una sesión de fotos va más allá del hecho de tomarte fotos que quedarán para toda la vida. Cuando por tu cabeza se te pasa esa idea lo primero que debes hacer es buscar los referentes que más te gustan, seguramente en alguna revista o en internet viste una foto que te enamoró y esa foto despertó en ti el deseo de hacerte un estudio fotográfico con el fin de conseguir esa foto que tanto te gusto.
Mucha gente siente nervios, vergüenza, y muchas inseguridades al pararse frente a una cámara, al no estar acostumbrados a hacerlo diariamente es algo que no conocemos y con lo que seguramente no nos sentimos cómodos, pero lo importante es afrontar esos miedos y dejar atrás nuestras inseguridades. Cuando ya has escogido el fotógrafo(a) que tomará tus fotos será mas fácil comenzar. Días antes de tu sesión yo te recomiendo que te pongas una cita con el fotógrafo, esto con el fin de conocerse un poco más, cuéntale el por qué tomaste la decisión de hacerte unas fotos, tus expectativas y hasta tus miedos, cuéntale un poco de tu vida, lo que te gusta hacer y lo que no y así todo será más fácil cuando nos enfrentemos a la cámara. Tanto para ti, como para el fotógrafo será un momento muy importante donde los dos se contaran sus cosas y se empezaran a conocer, recuerda que el trabajo del fotógrafo no es solamente hacer un click, por el contrario, él debe sacar lo mejor de ti, tu esencia y debe encontrar ese punto donde te sientas cómoda para que puedas actuar con mas naturalidad pues al final esto será lo que se reflejará en las fotos.
Después de haber tenido esa cita previa con tu fotógrafo comienza a mirar diferentes escenarios que te gustaría tener para tus fotos, tal vez quieras tener diferentes pintas de ropa lo cual es completamente valido, pero asegurare de tener esto definido antes de tu sesión de fotos. Si de pronto no conoces un lugar que te llame mucho la atención habla con tu fotógrafo que seguramente el conocerá varios, pero recuerda que hay veces lo más sencillo es una excelente opción, por ejemplo un parque, no necesitamos irnos a las afueras de la ciudad si junto a nosotros tenemos un parque con muchos arboles que nos permite hacer un excelente trabajo.
Ya se va acercando el momento de tus fotos, seguramente ese día te levantes un poco nerviosa porque harás algo que nunca antes habías hecho, pero ese día tomate tu tiempo, date un buen baño y un buen desayuno, no te olvides del tiempo pues no queremos estar corriendo al final. Llega donde tu fotógrafo un poco antes para que te sientas mas cómoda y tengan buen tiempo para hacer las fotos. Al final, vas a ver que la persona que tienes al frente no es un desconocido si no es alguien con el que ya has compatido algunos momentos y conoce algunos de tus miedos, así que la situación será más fácil, pues esa persona que esta afrente tuyo ya no es el fotógrafo sino tu amigo que espera y quiere lo mejor de ti y de tus fotos.