La experiencia de estar en un Workshop de fotografía boudoir y desnudo

Si quieres saber como es la experiencia de enfrentarse a un curso de fotografía boudoir y de desnudo hoy te contaré un poco sobre mi experiencia al participar en este workshop.

Llegar a un salón de clases donde eres la única mujer al principio puede ser un poco intimidante, pero con el paso del tiempo fui comprendiendo las ventajas que tenia solo por ser mujer y participar en ese workshop. Al principio, había algo de timidez por mi parte pero con el paso del día me fui soltando hasta comprender que para mi era un poco mas fácil y cómodo enfrentarme a dirigir este tipo de fotografías.

Para contarles un poco mas, el curso se dividió en dos días el primero hablamos sobre fotografía desnudo y el segundo sobre el boudoir, por las mañanas teníamos sesiones teóricas y por las tardes nos enfrentábamos a tomar nuestras propias fotografías, a dirigir y a escoger los lugares donde queríamos trabajar, nos enfrentamos a trabajar con diferentes tipos de iluminación y en diferentes escenarios, lo cual nos ayudo a soltarnos, a comprender mejor la luz y a lograr resultados interesantes. Para lograr una buena fotografía no basta con saber programar tu cámara, una buena fotografía va mas allá, necesita de una excelente dirección donde en un principio tienes total claridad de que es lo que quieres hacer y que es lo que quieres lograr, para poder transmitir tus ideas de manera clara y concisa a tu cliente.  Una muy buena forma de hacer esto es buscando referentes que te gustan o dibujando tu idea en un papel así tu modelo tendrá más claridad de qué es lo que debe hacer.

Cuando veo los resultados, encuentro fotos que me gustan mucho, otras que tal vez no tanto y en otras donde veo errores que me permiten aprender de ellos para no volverlos a cometer. Harrym y George los encargados de dirigir este workshop nos permitieron aprender de todo su conocimiento en este tipo de fotografía que por lo menos en mi caso era algo completamente nuevo pues nunca me había enfrentado hacer fotografías de desnudo o boudoir. Por esta y muchas otra razones más, solo me queda agradecer a todos aquellos que permitieron que esto fuera posible, a los que como yo fuimos aprender también les agradezco pues de todos pude aprender algo nuevo.